lunes, 24 de enero de 2011

Apuntes para nuestro 23 de enero de 2012



1. Retomar los espacios geográficos y sociales expropiados

Ayer se realizó la actividad “Sácate una foto contra la dictadura”. Fue una buena iniciativa juvenil, con una retroalimentación internacional importante. Sin embargo, no me agradó nuestra reclusión geográfica (Av. Fco de Miranda, cerca del Lido). Somos más que eso, tenemos que mostrarle a la ciudad y al país mucho más que eso.
Para la gente que no vive o trabaja por ahí, que no ve globovisión, ni tiene twitter, ni lee El Universal o el Nacional…. la oposición, con sus luces y sus sombras, como nosotros la conocemos, no existe. Sólo existe la imagen tergiversada, caricaturizada y demonizada que Chávez evoca de ella en cada una de sus alocuciones.
De ahí que resulte IMPRESCINDIBLE participar en espacios geográfcos y sociales más representativos del país. La gente la tenemos: eso lo demuestra un 52% de votos a favor de los diputados de oposición el 26-S. Sólo falta planificación, compromiso y atrevimiento a verdaderamente recorrer el país.

2. Canalizar mejor las ganas ciudadanas de participar

“Sácate una foto contra la dictadura” fue buena pero no suficiente: la MUD y los partidos políticos concertados se quedaron cortos al no planificar ellos mismos una actividad complementaria que conmemorara con el tenor histórico que merece el 23 de enero de 1958. Aparte de tomarse la foto, la gente no hizo mucho más. Esas ansias de participar pueden y deben canalizarse mejor.

3. Escuchar el discurso oficialista para detectar sus grietas y contradicciones.
Comunicar una propuesta alternativa coherente y que entusiasme.

El DISCURSO PRESIDENCIAL… fue una invitación a la locura y al rencor histórico. ¿celebró o no celebró el 23 de enero?
¿Era un momento clave para dar los nuevos lineamientos del PSUV? ¿A quién trata de arrastrar con el Polo Patriótico? ¿Qué significa ese acercamiento momentáneo a la clase media y a la defensa de la propiedad privada?
“El q no estudia a manos blancas va a parar”. Espero que el estudiante socialista y bolivariano no sea aquel que cuando le preguntan por un acontecimiento histórico grita “DE LA UNEFAAAAAAAAAA DE GUATIREEEEEE”
El pobre Fabricio Ojeda debe estar revolcándose en su tumba viendo como muchos psuvistas lo aplauden. ¿Tanta lucha, tanto esfuerzo, tanta guerrilla para traer a los boliburgueses a beberse los recursos del Estado? Para hacer una revolución de mentira que gire en torno a un hombre?
¿A QUIÉN ESTOY AYUDANDO – AHORA Y EN EL FUTURO- A QUE OBTENGA EL PODER? Ese el miedo, la preocupación fundamental de todos aquellos que dan su vida por un sueño de cambio, por una patria distinta.